EL COVID EN UNA STARTUP

Con las gafas de financiero en una startup, me gustaría contaros lo que ha supuesto para las pequeñas empresas este contexto nuevo, inesperado y global del Covid-19, que ha desencadenado muchas situaciones y reacciones. 

LA FUENTE

Durante los últimos 5 años el ecosistema español ha batido el récord año tras año en materia de financiación para el sector del venture capital. El dinero fluía y esa abundancia de capital había propiciado que los inversores se creyeran cualquier cosa que se les pusiera delante sin profundizar en la realidad de los números.

Pero… ¿qué sucede? ¿Estamos viviendo un escalón? La respuesta es simple. Durante 2 meses esas decisiones han estado pesando como piedras en las espaldas de los gestores de capital que necesitaban reducir sus excedentes de liquidez. 

Pero tras 2 meses de pánico, el sector del venture capital está tratando de recuperar el terreno perdido. En Mayo se han realizado inversiones por valor de más de 70 millones de euros. Esta situación confirma que el exceso de liquidez sigue en el mercado pero algo está cambiando. 

Por ello, en plena crisis del COVID-19 muchas empresas y startups optaron por ejecutar planes de financiación bancaria sin tener muy claro por qué lo hacen o acuden a los inversores en busca de un salvoconducto que les dé unos meses más de tesorería. 

LOS ICO

Después de más de 80 días de confinamiento por el covid, mi banco de referencia me comunica, como si del patio del colegio se tratara, que muchas entidades bancarias están intentando utilizar esta crisis para hacer negocio con los ICO. 

Desde mi punto de vista, este es el primer error. Desplegar esa ingente cantidad de capital sin unas directrices claras y concisas, con el único lema de aportar liquidez al mercado. 

El segundo “chisme” que me cuenta es que las empresas están intentando colar solicitudes para obtener un excedente de liquidez que les permita financiar algunos proyectos que tenían para más adelante o que en una situación “normal” no conseguirían financiación.

Volvemos a lo mismo que con el primer error. No hay culpables, el error es desplegar millones de euros a un tejido empresarial que no está preparado para recibirlos ni canalizarlos.

 

Actualmente el ICO evalúa miles de empresas para valorar si son financiables o son otro de los tantos “pufos” que les están llegando a diario. 

 

Ahora, imagínate una startup donde los números no acompañan porque es evidente que las pérdidas son abultadas, que el estrés del CEO o del responsable es evidente respecto a la liquidez y para colmo, un sector bancario que NO está preparado para trabajar en remoto. 

covid-CEO

Cuando empezó el coronavirus en España y se declaró el estado de alerta el día 14 de Marzo de 2020. Las siguientes dos semanas para cualquier financiero fueron una pesadilla. 

Planes de reestructuración completa de empresas en 2 días con 100 escenarios diferentes.  Porque evidentemente nunca nos habíamos enfrentado a algo de esta magnitud. 

Los famosos ERTE en la boca de todos los directivos, pero la pregunta que más se repetía siempre era la misma, ¿Dónde está el ICO? 

Los ICO durante el Covid-19

Durante esta cuarentena he conseguido más de 5 ICO para diferentes empresas que han solicitado mi ayuda puntualmente. Y he podido comprobar de primera mano la ineficiencia del sector bancario.

He llegado a ver criterios diferentes dentro de la misma entidad financiera que os aseguro que no dependen de los ingresos, el modelo de negocio u otros criterios tangibles. Por extraño que parezca, dependen de la localización y del agente que te tocara. 

Un simple plan de tesorería y de reestructuración me ha servido para conseguir varios de los ICO. Pero el último de todos, una PYME con ingresos recurrentes y en beneficios durante toda su historia que evidentemente ha tenido una bajada de ventas fué el peor caso. Para esta empresa tuve que preparar poco más que un trabajo final de máster para que nos concedieran el equivalente a 1 mes de ingresos. La friolera de 25k€, que tuvieron que articular en su primera oferta, mediante póliza de crédito a corto plazo. 

 

En conclusión, tomate tu tiempo para analizar lo que te proponen los intermediarios financieros, si es necesario pregunta porque nada es gratis.

 

Si tienes alguna duda, no dudes en contactarme a través de Linkedin o de mi página web.

Un agradecimiento especial a Javi Torregrosa por su visión en la redacción de este artículo.

 

Alex.

¿TE HA GUSTADO?

¡Comparte!